REDACCI脫N: El ONCE HN
La Selecci贸n de Honduras ha disputado tres mundiales en su historia, teniendo el mejor resultado, dentro de lo que cabe, en Espa帽a 1982 con dos puntos tras igualar contra Espa帽a e Irlanda del Norte, solo cay茅ndose ante Yugoslavia.
En Brasil 2014 se ten铆an muchas expectativas con aquella selecci贸n que hab铆a logrado un Aztecazo y pr谩cticamente clasific贸 sin problemas, pero termin贸 como un desastre total anotando un solo gol y permitiendo ocho en tres juegos.
El p茅simo rendimiento tiene sentido despu茅s de destaparse el esc谩ndalo suscitado en la competici贸n. Esta pieza es la que faltaba en el rompecabezas tras la inesperada renuncia de Luis Fernando Su谩rez tras volver del mundial.
De acuerdo a informaci贸n compartida por el periodista Limber P茅rez en “Deportes Al Desnudo”, los federativos metieron mano de una forma asquerosa en la convocatoria.
Resulta que metieron dos jugadores que no merec铆an el llamado como Juan Pablo Montes y Edder Delgado. Los dirigentes informaron al entrenador colombiano que ellos convocar铆an 11 de los mundialistas.
A pesar que Su谩rez quiso ponerse al brinco, como decimos popularmente, se vio contra las cuerdas porque si no aceptaba le rescindir铆an su contrato. Entonces resisti贸 que le impusieran jugadores y cuando finaliz贸 el mundial se march贸.
Otra de las situaciones es que los propios seleccionados quer铆an armar la alineaci贸n titular, acto de rebeld铆a que tambi茅n permiti贸 Su谩rez para no complicarse la vida.
Cuando la cabeza est谩 podrida imagen el resto esto no s贸lo pasa en la H cuando los gobiernos s贸lo quer铆an enriquecimiento personal todo el liderazgo busca lo suyo el pueblo no importa El Hondure帽o necesita levantarse en convicci贸n y firme para depurar a una Honduras en manos de pol铆ticos enga帽osos
En Honduras cualquier cosa puede pasar. Considerando que, vivimos en una sociedad podrida, no podemos descartar que la falta de valores 茅ticos y morales pueden generar este tipo acciones y/o comportamientos nocivos que afectan los buenos resultados en cualquier actividad en nuestro pa铆s, y en este caso al f煤tbol.