Después de un fin de semana festivo tras lograr la clasificación a la gran final del torneo Clausura, el técnico de Honduras Progreso, Wilmer Cruz y su equipo de guerreros ya empezaron a trabajar la estrategia con la que intentarán ganarle el título a Motagua.

Cruz reconoció que el viaje de regreso a El Progreso, “fue una fiesta”, pues los jugadores tomaron el control del autobús y en el camino a casa se detuvieron reiteradamente a comprar comida y bebida, por lo que llegaron de madrugada a la Perla del Ulúa.

“Dormir ha sido bastante difícil y complicado porque son emociones que se viven muy poco, pero ya estamos descansando tranquilos y concentrados en los juegos de la Final”, declaró Cruz hoy en la cancha de entrenamiento.

Sobre el rival a enfrentar respondió: “Tenemos muy bien analizado a Motagua, en qué nos puede hacer daño y todas sus virtudes”.

En cuanto a las lesiones aseguró que ya están recuperados Mariano Acevedo y Owen Morales. En cuanto a Jerrel Britto explicó que están esperando un último informe médico, pero afirmó que estará muy bien en todos los sentidos para jugar la finalísima.

Finalmente el técnico Wilmer Cruz confirmó la fecha y sede del juego de ida de la gran final: “Ya definimos que vamos a jugar en el sábado 7:15 de la noche en el estadio Humberto Michelleti, porque es nuestra casa y nos sentimos cómodos”.