REDACCIÓN: El ONCE HN
Es muy claro que la gestión deportiva en el Motagua no fue la mejor tras salir campeones, en primera instancia tuvieron problemas para renovar a todos los que se quedaron sin contrato y posteriormente dejaron escapar a sus dos delanteros principales.
Estos problemas están evidenciados con una delantera poco convincente, sobre todo ahora con la suspensión de Rodrigo Auzmendi por el escupitajo. Ahora mismo son cuartos en la tabla de la Liga Nacional y en la Concachampions están casi fuera.
Uno de los grandes señalados es Emilio Izaguirre, que sigue recibiendo fuertes críticas partido a partido, sobre todo en esta racha de tres derrotas consecutivas y a las puertas de la vuelta ante Cincinnati FC.
Aparte de la pobre gestión deportiva, la afición azul también está molesta porque se encuentra muy involucrado en su campaña política como precandidato a diputado. Consideran que está entregando muy poco tiempo al equipo.
Al sumar muchas críticas, Milo tomó una determinación en las últimas horas, y no, no es renunciar al ciclón azul, sino mostrar evidencia que sigue trabajando en pro del equipo. Compartió una historia desde el TQL Stadium, comprobando que sus labores no las deja a un lado.
Es extraño que lo haga, porque normalmente no se preocupa porque los aficionados vean que si está trabajando.
