REDACCIÓN: Diario Sport

No hay vuelta atrás. Javier Mascherano no finalizará la temporada defendiendo la camiseta del Barça. La decisión está tomada y el futbolista ha recibido todas las garantías de la cúpula del club para que cierre sin problemas su nuevo contrato con el Hebei Fortune chino.

La operación se hará realidad en los próximos días con independencia que el Hebei chino mejore o no su oferta económica de traspaso. El presidente Bartomeu y el mánager Pep Segura así se lo han trasladado al futbolista argentino.

Tras comprobar que la decisión del ‘Jefecito’ era firme –en verano ya intentó sin éxito que que el Barça le liberara de su contrato–, ambos han entendido que Mascherano ha acumulado méritos más que suficientes para respetar su decisión de poner el punto y final a su etapa como jugador azulgrana.

Decisión inminente Mascherano abandonará el Barça seguro en el transcurso del mercado invernal, aunque este proceso todavía debe concretar dos fases importantes. La primera de ellas es la firma del traspaso entre el club azulgrana y el Hebei Fortune. El agente del jugador, Walter Támer, ya ha trasladado la oferta en firme y, a falta de los clásicos flecos, el Barça se ha comprometido a sellarla en cuestión de día. Y es que el club chino ha insistido en la necesidad de rubricar la firma para evitar que la operación se pueda ir al traste y quedarse sin el internacional de la albiceleste.

Al igual que Javier Mascherano, el Hebei Fortune reclama sus garantías en forma de firma contractual y, a ser posible, antes de Navidad. Transcurrido este plazo el club chino entendería que queda liberado de sus compromisos y podría escrutar en el mercado otras operaciones.

Bartomeu, Pep Segura y el resto del área deportiva han tranquilizado a agentes y club chino insistiéndoles que no habrá problemas para rescindir el contrato de Mascherano. Justo en este punto entra en juego la segunda fase en litigio, que no es otra que asegurar el relevo del Jefecito en el vestuario.

Los técnicos no han cerrado el debate del sucesor, aunque sí se han comprometido a dar un nombre de forma inminente. El debate es tan sencillo como delicado: por un lado, el colombiano Yerry Mina está atado, aunque adelantar su llegada antes del verano podría variar las condiciones económicas estipuladas en su día –9 millones de euros–. El sobrecoste exigido por Palmeiras y la lógica adaptación del futbolista a la Liga española plantean algunos recelos. En estos momentos, Pep Segura sería uno de los grandes valedores de Yerry Mina y estaría en disposición de asumir los riesgos del fichaje.

Por contra, otros informes apuntan a nombres más experimentados, tanto por su edad como por su experiencia en Ligas y competiciones europeas. No se trata de cracks, pero sí de futbolistas solventes que en momentos puntuales pueden solucionar los problemas derivados de tarjetas o lesiones.

La lista de alternativas es reducida, aunque todavía no existe quorum en el Barça. Se garantiza fichaje y cuando el refuerzo pueda estar en condiciones de debutar, Javier Mascherano tendrá la merecida salida del club que se ha ganado a pulso con una hoja de servicios inmaculada. El pacto verbal ya está acordado, ahora falta el fichaje del sustituto.