La FIFA informó este lunes que la selección de Honduras no podrá jugar en el estadio Olímpico de San Pedro Sula el próximo partido contra Costa Rica. La sanción, con multa de 40.000 dólares, es consecuencia de los incidentes registrados en el enfrentamiento ante Panamá.
Durante el juego contra los panameños se suscitaron nuevamente los gritos de “culero” hacia el árbitro central cuando este pitaba a favor del rival, situación que fue reportada en el informe por el comisario del juego.
Pero más grave aún fue lo sucedido después del encuentro, cuando aficionados hondureños comenzaron a lanzar objetos al terreno de juego, poniendo en peligro la integridad física de los jugadores catrachos y panameños.
Al no poder jugar en San Pedro Sula Honduras deberá jugar en Tegucigalpa contra Costa Rica, el partido del 28 de marzo correspondiente a la cuarta fecha del hexagonal rumbo a Rusia 2018.
En caso de persistir este tipo de comportamiento del público hondureño, la FIFA podría sancionar a su selección haciéndola disputar sus partidos de local a puertas cerradas, provocándole grandes pérdidas económicas y restándole fuerza a su localía.
Honduras ya había recibido castigos económicos por parte de la FIFA por mal comportamiento de su público en la ronda anterior, donde enfrentaron en San Pedro Sula a Canadá, El Salvador y México.