REDACCIÓN: El ONCE HN
En el pasado encuentro entre Honduras Progreso y Platense se vivió un tenso momento, donde una mala actuación de primeros auxilios puede terminar en una verdadera tragedia futbolística.
Aldair Peña sufrió un golpe en la tráquea que casi le provoca su muerte, de hecho, estuvo cerca de ahogarse con la lengua hasta que Yerson Gutiérrez ayudó a meterle los dedos en la boca e impedirlo.
En Diario Diez el colombiano manifestó: “Ha sido lo más duro que me ha tocado vivir; miré la muerte de cerca”.
Experiencia desagradable: “Soy joven y es la primera vez en mi carrera que esto me sucede algo como esto. Marcar un autogol, listo, está bien, nadie está exento de eso, pero luego el golpe en la tráquea, nunca había sentido tanto miedo en mi vida”.
“Sentía que me quedaba sin aire cuando quería respirar. Ya cuando mi compañero me mete los dedos en la boca y me saca la lengua, ya yo empiezo a respirar con mucha dificultad”, aceptó.
Tuvo un salvador en la cancha: “Fue Yerson Gutiérrez. Yo pensaba que era el arquero, escuchaba su voz pero no pensé que era Yerson. Ya cuando comienzo a respirar se me durmió la mitad de la cara y fue allí cuando comencé con más miedo y tenía ganas de vomitar y no lo hacía; intentaba, intentaba y mi corazón se comenzó a acelerar demasiado”.
“Luego comenzaron a estabilizarme en el hospital y me hicieron los exámenes para descartar anomalía, gracias a Dios ya estoy estable y entrenando con el equipo”, cerró su relato.