El habilidoso delantero hondureño, Clayvin Zúniga, habló con Pasión Limeña. Durante el encuentro entre Municipal Limeño y C.D. Águila, Clayvin en una desafortunada jugada, chocó con el guardameta emplumado, Josué Coreas, y sufrió una fractura lineal de tibia en la pierna izquierda, su recuperación lo obliga a alejarse de las canchas entre dos a dos meses y medio.
“El doctor me dijo que estaré fuera de las canchas entre dos y dos meses y medio. Un mes para andar el yeso, luego otro mes usando una bota ortopédica y después viene el tiempo de recuperación mental y física”, dijo el jugador.
Clay, no se guarda y se muestra completamente agradecido con sus compañeros y cuerpo técnico, que desde el momento en que fue obligado a salir del campo de juego mostraron sus muestras de apoyo.
“Mis compañeros me han apoyado bastante, me visitan y están conmigo. El cuerpo técnico se acercó ayer y estuve platicando con ellos”, comentó.
La alegría que caracteriza a Zúniga se ha visto opacada y es algo notable, pero el hondureño se muestra optimista al saber que su lesión pudo haber sido aún peor pero no paso a más.
“Me siento mal y muy triste, como jugador no quisiera que pasaran este tipo de cosas, pero es la voluntad de Dios. Ahora toca luchar en contra de la corriente, quizá otra cosa peor pudo haber pasado y gracias a Dios, solo es una fractura en la que el hueso no se salió, se mantuvo y eso es muy importante”, concluyó.