El goleador de la Sub-17, Carlos Mejía anda atravesando por un buen momento en su corta carrera como futbolista. Después de coronarse como líder de goleo en el pasado premundial de su categoría con la selección de Honduras, este miércoles se puso la camisa del Vida y el Olimpia probó su veneno.
Los cocoteros derrotaron por la mínima diferencia a los capitalinos en el juego de ida de las semifinales del torneo Clausura 2016-17 de Reservas. El solitario gol lo marcó el seleccionado nacional en la primera parte.
Para el segundo tiempo, el Olimpia, dirigido por Danny Turcios se conformaba con salir derrotados de La Ceiba por 1-0 y asestar el golpe en la capital de la República. El Vida mantuvo la pelota en su poder pero nunca pudo asestar la estocada que le permitiera manejar el encuentro de vuelta.
La visita cogió valor de irse al frente tras la expulsión del defensor central del Vida, Darwin Diego. Los papeles se invirtieron y era el Vida que terminó apostando al contragolpe a través de la velocidad de Carlos Mejía y César Guillén, el joven goleador del equipo de primera división.
A pesar de eso, ambos tuvieron ocasiones para mover los cartones. Primero fue Guillén que rebotó una pelota en el horizontal de los blancos y luego, los “leoncitos” le mecieron uno de los verticales a los cocoteros.
De esta forma, Mejía, quien fue la gran figura hondureña en el pasado Premundial de Concacaf Sub-17, sigue demostrando su gran calidad futbolística.
“Allá en Tegucigalpa hay que salir a ganar, gracias a Dios hoy logramos sacar el triunfo y afortunadamente pude aportar con el gol”, declaró Mejía al cierre del encuentro.
Al ser consultado sobre su futuro futbolístico respondió: “Seguiré trabajando cada día más con mucha humildad y Dios sabrá cuál será la mejor oportunidad para mí en el futuro”.
El sábado ambos clubes disputarán el choque de vuelta en el Estadio Nacional, como previa a las semifinales de la Liga Nacional entre Olimpia y Honduras Progreso.