El seleccionado sub-17 de Honduras, Carlos Mejía, es el llamado a convertirse en la nueva “perla” del fútbol hondureño, sus siete goles convertidos en el pre-mundial de Panamá, lo han puesto bajo la lupa de varios clubes internacionales, sin embargo esto no lo marea, tal y como lo expresa el mismo jugador en su lugar de concentración con la bicolor catracha.
A pocos días de partir hacia España para una serie de fogueos previo a su presentación en el mundial de La india 2017, el jovencito de 17 años comienza a palpitar lo que será la quinta presentación de Honduras en el mundial de la categoría y aunque evita que lo comparen con jugadores como Alberth Elis o David Suazo, reconoce que es admirador de los jugadores Romell Quioto (Houston Dynamo) y Bryan Moya (Olimpia).
Mejía, un delantero zurdo nacido en 2000 que milita en el Vida, estuvo a punto de quedar fuera de la convocatoria de José Valladares el pasado mes de julio, debido a una lesión de meniscos, sin embargo este se declara totalmente recuperado e ilusionado con ser parte de los 21 futbolistas que viajan próximamente al mundial.
“Afortunadamente ya estoy trabajando al cien por ciento con el grupo, al principio me sentí triste cuando supe de mi lesión, pero hoy ya he superado mi malestar, quiero demostrar al profesor y espero hacer un buen papel en el mundial del próximo mes de octubre”.
“El hecho de ser el goleador del pasado pre- mundial me brinda mayor confianza, pero no me marea, trabajo fuerte al igual que mis compañeros, por ahí hay algunos aficionados que ya me están comparando con Alberth Elis o David Suazo, los respeto mucho a ellos como futbolistas, pero quiero ser único, sin negar que en estos momentos admiro a Rommel Quioto y Bryan Moya”, manifestó el jugador que espera estar en el listado final que este lunes brindará el técnico José Valladares.
Hay que reconocer que Mejía terminó el torneo con siete goles, por delante de los máximos artilleros de México y EE UU, que disputaron la final.
Su primer gol llegó ante Panamá en el primer encuentro ante los anfitriones, después hizo dos más ante Curaçao y marcó uno más ante Haití. En la segunda fase arrancó con otros tres tantos ante Cuba en el primer partido y luego no pudo repetir ante EE UU.