REDACCIÓN: FIFA

El lunes 9 de octubre asistimos a la clasificación de otras dos selecciones europeas para la Copa Mundial de la FIFA. Islandia y Serbia no dieron lugar a las sorpresas y se aseguraron la primera posición de los Grupos I y D, respectivamente, mientras que Gales y Ucrania, ambas en casa, se esforzaron en vano por alcanzar la segunda plaza. 

Al mismo tiempo que Islandia conseguía la clasificación directa, Ucrania y Croacia ofrecieron espectáculo en un partido vistoso y desbocado, con el segundo puesto del Grupo I en juego, sin dejarse atenazar por la responsabilidad y desplegando un buen fútbol.

Andrej Kramaric marcó diferencias al anotar un doblete en el segundo tiempo, de un sensacional remate de cabeza y otro gol de auténtico depredador del área, dando así la victoria y la segunda posición a los balcánicos.

Tres días después de haber dejado escapar la clasificación contra Austria, Serbia prolongó ante su público un insoportable suspense frente a Georgia durante 74 largos minutos, hasta que Aleksandar Prijovic desató la euforia en Belgrado con su primer gol como internacional.

A su vez, Gales sufrió un duro golpe ante su vecina Irlanda, que se llevó un 0-1 de Cardiff merced a un tanto de James McClean y le arrebató la segunda plaza. Austria, ya eliminada, sumó los tres puntos en Moldavia.

Islandia acudía como líder a su encuentro en casa ante Kosovo, farolillo rojo del grupo con un solo punto en nueve partidos… Podría parecer una clasificación fácil, pero no lo fue en absoluto frente a un cuadro kosovar bien organizado y un cierto nerviosismo que se apoderó del equipo ante la perspectiva de hacer historia, hasta que Gylfi Sigurdsson permitió respirar a Reikiavik antes del descanso, con una gran jugada dentro del área.

Johann Gudmundsson hizo que todo un país pudiese celebrar un logro histórico al firmar el segundo gol tras la hora de juego.