POSICIÓN 8: Nacionales

REDACCIÓN: El ONCE HN
FECHA: 31/07/2017

La estadía de Ronaldinho en nuestro país y lo emotivo que fue este hito para el fútbol nacional.

Tener un crack como el brasileño no es de todos los días. La fiesta que se vivió en el Estadio Nacional de Tegucigalpa demostró muchas cosas que creíamos perdidas para este deporte en Honduras.

La forma como interactuaron aficionados del Real España y Motagua disfrutando de este agradable momento nos hizo voltear la mirada al pasada, tratando de recordar un hecho como el del domingo donde la afición se unió.

Las últimas veces que se ha visto tal armonía en un estadio hondureño es para los encuentros de la Selección, que logró clasificar a los mundiales de 2010 y 2014.

Apartando esos casos especiales, nuestro fútbol se manchó con acontecimientos bastante grises: peleas entre aficionados, muertos por lucha de barras, colisiones múltiples, entre otros.

La violencia que impera en la sociedad catracha ha alejado año con año a todo los amantes del deporte rey de las instalaciones, privándolos de apoyar nuestra Liga.

La visita de Dinho parte la historia en el fútbol de Honduras, deja atrás esos actos negativos relacionados al mismo, vislumbra un futuro brillante de cara a los próximos torneos nacionales.

Ver tremenda demostración de hermandad entre hinchas aurinegros e hinchas azules nos confirma la nobleza de la afición, nobleza que nos hace recapacitar que todo puede cambiar y cuando nos lo proponemos convertimos el fútbol en un espéctaculo sano y de PAZ.

Quizá los resultados no sean tan inmediatos e impactantes, pero Ronaldinho Gaucho puede estar feliz por su paso en HONDURAS, el juego donde mostró su magia, verdaderamente podrá traer la PAZ.