REDACCIÓN: Diario AS

El Liverpool tiene en su mano un nuevo título. Telegraph afirma que los clubes de la Premier League están dispuesto a dar por finalizada la temporada y que los de Klopp ganen el campeonato de liga sin jugarse las jornadas que resten.

De momento la liga inglesa está parada hasta el 4 de abril. Sin embargo, los directivos no están convencidos de que sea conveniente retomarla. Una de las opciones que barajan es dar por finalizada la temporada según está ahora mismo. En la parte alta de la tabla no habría reclamaciones. Los reds están a 25 puntos de ventaja sobre el City y sólo les faltarían dos victorias para completar el título.

Donde más inconvenientes habría sería en la parte baja de la clasificación. Normalmente bajan tres de categoría pero a día de hoy hay cinco equipos implicados. Norwich City, Aston Villa, Bournemouth, Watford y West Ham. Estos tres últimos están empatados con 27 puntos, de ahí el problema.

La solución sería bloquear los descensos. Ninguno de estos cinco equipos perdería su plaza en la máxima categoría. Además, también se plantea que asciendan dos de la Championship (Leeds y West Brom) y la Premier pasara a tener 22 equipos.

En este sentido, el presidente de la Federación Inglesa de Fútbol (FA), Greg Clarke, teme que la Premier League “no se pueda terminar” por culpa del coronavirus: “Todas las partes involucradas están comprometidas a tratar de completar el programa de competiciones nacionales y están en contacto para encontrar las soluciones adecuadas para este propósito”, dijo el comunicado público de la FA, pero el diario ‘The Times’ ha desvelado la verdadera “preocupación” del dirigente por buscar soluciones al calendario.

Según la edición digital del periódico, el presidente de la FA no cree que la Premier pueda llegar a su fin. Clarke expresó su escepticismo en la reunión de emergencia, celebrada el pasado viernes, después de la cual la federación (FA) y la Premier League anunciaron que la primera división quedaba suspendida.

Durante esta reunión, Clarke estimó que la suspensión sería más larga de lo previsto y que los equipos no podrían jugar todos los partidos en su calendario debido al aumento esperado en el número de casos de coronavirus; así como por la acumulación de competiciones a nivel europeo.