REDACCIÓN: El ONCE HN

Carlos Restrepo se convirtió en el primer técnico del Olimpia capaz de celebrar una final contra el Motagua, y eso le permitió volver en 2017 para ganar la Liga CONCACAF. No obstante, la estancia fue corta.

El colombiano admitió en Diario Diez que sintió el descontento de la afición, por lo cual prefirió hablarlo con la directiva. Misma historia le pasó en Real España, donde lo consideraron un aficionado de los merengues.

Olimpia significa bastante para él: “Quiero mucho a la institución, me abrió el país, logramos un título nacional y jugamos otra final, luego se ganó la Concacaf League que fue un paso bonito en el orden internacional”.

“No me gustó que en el estadio trataran mal a los jugadores, no me gustó porque los muchachos hacen un esfuerzo, tenemos tardes buenas y malas. Pero la afición ya estaba en ese tema”, no dudó en mencionar el mal trato que sentía.

Volver al albo: “Creo que estamos en la historia, con las puertas abiertas, el respeto con gente educada que va encaminando bien al equipo. Lo he visto con esa estampa de campeón, seguimos en contacto y ojalá se pueda regresar”.

“En muchos medios dijeron que me habían sacado de Real España, no, no me sacaron: yo renuncié, no quise seguir. Hubo un detalle de entrada que no me gustó tampoco, me hubieran dicho el tema de Olimpia. Si yo acepto a ir a otro club de un país, me muero por ese equipo, porque soy un profesional del fútbol”, afirmó.

Un mal rollo de los aficionados aurinegros: “Me identificaron con Olimpia como si yo fuera un vendido, un irresponsable, una persona poco honrada y eso me dolió mucho por lo que soy y que he hecho”.