REDACCIÓN: El ONCE HN

Eterno capitán del Motagua y la Selección de Honduras, Amado Guevara desarrolló una de las carreras más brillantes en la historia de nuestro fútbol, alcanzando la gloria en todos los niveles imaginables.

En una amena charla con el programa “La Hora del Té” brindó algunos detalles del orígen de su gusto por el deporte, aunque no era su sueño principal. También narró la interesante historia de su dorsal 20.

“Vengo de una familia futbolera, como sabemos en Honduras el deporte rey es el fútbol, siempre lo jugué desde niño. Agregando que dos de mis tíos jugaron en primera división y crecí con esa imagen, ese sueño de querer ser como ellos”, inició diciendo.

Su principal sueño: “Me encantaba el fútbol, lo jugaba a toda hora que podía, pero mi sueño era ser piloto, me gustaba la aviación. Aunque siempre tuve el sueño de jugar en Motagua y llegar a la Selección Nacional”.

Ídolo de niño: “Tenía varios, como siempre me gustó el fútbol. En ese entonces seguía la selección de Brasil, Zico, Socrates, también a Diego Maradona, todos queríamos ser como él, crecí con esas grandes figuras”.

“La historia del 20 comienza en la eliminatoria de 1996, en las selecciones menores usaba el 4 y en el Valladolid usé el 19. Cuando me convocan a la Selección, el 4 lo tenía un histórico como Juan “El Montuca” Castro, era imposible quitarle el número”, detalló.

Se quedó con ese número: “Mi edad era importante, entonces agarré el número 20 y se lo pedí al utilero, pero no había ese número, entonces convencí al profesor y me ayudó. Luego hasta en el contrato negociaba el 20 incluido”.