REDACCIÓN: El ONCE HN

De no ser tomado en cuenta en el Olimpia hasta pensar en el retiro, muchas cosas sucedieron previo al éxito en la carrera deportiva de Carlos Pineda, futbolista ahora tildado de exportación como legionario.

En un Live con el periodista Enrique Merino recordó una de las decisiones más importantes de su carrera, la cual consta del Real de Minas. El mediocampista ahora saborea las mieles del triunfo con los melenudos y la H de Fabián Coito.

El momento que salió la opción del préstamo: “Ya después hablé con el profesor Raúl Cáceres y le dije que me iba a ir a Real de Minas. Recuerdo que el Minas todo el mundo lo hacía descendido”.

“Le pedí consejos a Manuel Keosseián de qué podía hacer, él me dijo que trabajara bien pero que tenía cuatro jugadores antes que yo, fue sincero y me dijo que se tenían que lesionar los tres para que me metiera, entonces allí dije, me iré al Real de Minas”, apuntó.

Solo le resaltaban aspectos negativos: “Aunque muchos me decían allí vas a ir a descender, llevarás una cruz y allí no pagan. El profesor Raúl me dijo, el descenso no me da miedo, venite, estoy armando un buen equipo”.

Su padre le decía que siguiera como albo: “Le pedí consejo a mi papá y me dijo que me quedara en el Olimpia, pero al final tomé valor, me fui y no sabía la magnitud de lo que me había metido”.

“Aquí viene un muerto, porque ese Olimpia es una morgue”, dijo Cáceres en su primer día entrenando con los mineros. “Gracias a Dios hicimos un buen grupo, fue una experiencia que viví allí en Minas que no las olvidaré. Fue una gran experiencia”.

Hoy en día: “Yo me quedé tranquilo en Olimpia, hasta cuando el profesor Pedro Troglio dijo que me quedo. Creo que fue por lo que hice en los Juegos Panamericanos que me miró y dijo que contaba para mí”.