REDACCIÓN: El ONCE HN
Nacido en Estados Unidos, pero de orígenes en Honduras, Javier Amaya (22 años) se siente mitad y mitad de ambos países, esperando tener la oportunidad de defender a cualquiera de las dos selecciones.
El mediocampista charló en EXCLUSIVA con Diario Deportivo El ONCE HN referente a su llegada al Alcorcón, aspiraciones en Europa y también su paso por las filas del Motagua.
ENTREVISTA COMPLETA
¿Cómo incursionas en el fútbol?
Muy bien, vengo jugando desde los 2-3 años que aprendí pegar al balón con mis hermanos.
¿Cuáles fueron tus equipos previo a la aventura en Europa?
Pasé por las reservas del Motagua por un tiempo, después di el paso para Broncos FC en Choluteca, luego me fui para El Salvador para jugar con Marte.
¿Cómo se da tu fichaje por el Alcorcón?
Fiché por un año con opción a prolongar un año más.
¿Tuviste alguna otra oferta u equipo interesado antes que Alcorcón?
Si, tuve ofertas en Guatemala y Estados Unidos.
¿Estarás jugando con el primer equipo o la filial?
El filial del Alcorcón.
¿Cuáles son tus máximas pretensiones en el fútbol español?
Llegar a jugar a La Liga o de los top 5 de Europa.
¿Sueñas con llegar a algún equipo europeo en específico?
Si, cada uno tiene un sueño de jugar para un club, me gustaría jugar para cualquier club de los Top 5 ligas.
Retrocediendo un poco, jugaste en Motagua, ¿qué tal te fue esa etapa?
Me fue bien, gracias a Dios, pero no creo que jugué mucho, quería desarrollar y crecer más como jugador entonces decidí irme para Broncos.
¿No te ofrecieron ascender al primer equipo en Motagua?
No, no me ofrecieron.
¿Te sientes más hondureño que estadounidense?
Mitad y mitad, hablo los dos idiomas, nací en los Estados Unidos y me crecí allá, pero conozco mucho Honduras, voy desde niño, le tengo mucho amor a los dos paises.
¿Te veremos jugando en la Selección de Honduras?
Primero Dios pudiera defender el escudo de cualquiera de mis países.
¿Has tenido acercamiento de la FENAFUTH o US Soccer?
US Soccer se acercó a mí cuando era niño, entonces con ellos, la FENAFUTH nunca se acercó a mí, primeramente Dios ahora si me pongan ojo.