REDACCIÓN: El ONCE HN
La desesperación del Chelsea por reforzar su plantilla está a punto de provocar un efecto dominó con el Barcelona como gran beneficiado y con Pep Guardiola como gran perjudicado. Este movimiento provocaría que Thomas Tuchel le abra la puerta a Marcos Alonso, pretendido por los blaugranas, y se consideraba intransferible hasta que el Chelsea no le fichara un sustituto de garantías.
Al otro lado de la balanza aparece el Manchester City, que por orden de Pep Guardiola lleva semanas negociando este fichaje. Los citizens habían llegado a ofrecer 40 millones de euros, una cifra muy elevada que, aún y así, el Brighton se negaba a aceptar, pues el precio de salida era de 60 millones de euros, cifra que estaría desembolsando el Chelsea.
Ha sorprendido que Marc Cucurella haya llegado también a un acuerdo con el Chelsea cuando ya lo había hecho previamente con Pep Guardiola. El entrenador catalán contaba con él y prácticamente daba por hecha su llegada.
Una vez se oficialice el traspaso de Cucurella al Chelsea, el Barcelona volverá por el fichaje de Marcos Alonso, el elegido por Xavi Hernández para competir con Jordi Alba por el lateral izquierdo. El futbolista ya le ha comunicado a Tuchel que su intención es fichar por el Barça, aunque si el entrenador alemán, molesto con el club blaugrana por el asunto Koundé, le cierra la puerta del Camp Nou, le destino sería el Atlético de Madrid.