El hondureño Miguel Ferrera se encuentra en plena ruta de preparación para el próximo mundial de taekwondo, donde buscará mantenerse en lo alto del deporte. Ha hablado con Diario Más.
Expectativas del próximo mundial: Si, ya está a la vuelta de la esquina y como bien lo dice, es un campeonato Mundial, no es una competición sencilla, el reto es grande y la expectativa como siempre es mejorar las participaciones pasadas. Aunque debo confesar que mi objetivo personal es colarme a las medallas.
Preparación: Hasta este momento nos hemos mantenido dentro del país, haciendo preparación física y técnico, táctica, estamos muy comprometidos con nuestros deseos de mejorar. Lastimosamente no hemos podido competir como quisiéramos, sin embargo gracias al Comité Olímpico Hondureño asistimos al Us Open (abierto Estados Unidos) el pasado mes de febrero, donde puede avanzar hasta los cuartos de final.
Viaje a Europa: Sí, justamente el próximo lunes viajará hacia Alemania, país en el que realizaré una intensa preparación durante seis meses.
Rivales: De momento seguimos sin saber quiénes serán nuestros oponentes, eso se definirá hasta el día después del pesaje una vez que estemos en Corea del Sur, mientras tanto habrá que hacer la tarea y prepararnos para enfrentar a los mejores.
Mantenerse en el ranking mundial: Es difícil, pero no imposible. Necesitamos asistir a más eventos que sumen puntos al ranking mundial y, de esta forma, ir escalando posiciones. En nuestro caso, lo más difícil es el financiamiento pero gracias al Comité Olímpico Hondureño, los esfuerzos de la Federación Nacional de Taekwondo y por supuesto con el apoyo de Herbalife poco a poco eso ira mejorando.
Retos para este año: Este es el primer año del ciclo olímpico, nuestros dos eventos fundamentales son El Campeonato Mundial en Muju, Corea del Sur en el mes de junio y los Juegos Deportivos Centroamericanos en Managua, Nicaragua, de diciembre. En general el reto es el de siempre, conquistar medallas y de la mano de Dios, darle alegría y motivo de orgullo al país y a todos los catrachos.