REDACCIÓN: CortesÃa
Con los 44 puntos que ha anotado ante los Blazers LeBron James ha entrado (un poco más) en la historia de la NBA. Se ha convertido en el quinto máximo anotador de todos los tiempos superando a Wilt Chamberlain, un mito de los Lakers y de este deporte. Son 31.425 puntos en 16 temporadas. Por delante tiene a Michael Jordan (32.292), Kobe Bryant (33.643), Karl Malone (36.928) y Kareem Abdul-Jabbar (38.387). Es decir, que si LeBron quiere acabar su carrera como máximo anotador de la historia de la liga tiene que meter 6.962 puntos. ¿Es algo factible?
Teniendo en cuenta su ritmo actual de anotación y sus planes de retirada (su entorno ha asegurado alguna vez que quiere jugar hasta los 40 años) la respuesta es afirmativa. Su media de anotación en toda su carrera es de 27,1 puntos en liga regular. Con esas cifras necesitarÃa jugar otros 252 partidos, es decir, algo más de tres temporadas. Pero lo lógico serÃa pensar que según pasen los años bajará su producción, motivado por la edad y por los minutos acumulados en su carrera (44.753). Aunque lo cierto es que no parece mostrar sÃntomas de cansancio y desde su llegada a los Lakers está jugando menos minutos que nunca (35 por partido).
De hecho, ahora mismo promedia más puntos (27,6) que el promedio de su carrera. Es más, comparado con sus medias totales en los Lakers tiene mejores números en rebotes, tapones, triples, porcentajes de triples y tiros de campo e iguala el de asistencias y casi el de robos. Todo esto, repetimos, jugando menos minutos que nunca. Una auténtica locura, un rendimiento que no parece tener fin y que amenaza con tumbar a los cuatro nombres que aún le quedan por delante en la lista de anotadores.
Aunque sin demasiadas diferencias en general, LeBron Tiene mejores números que cualquiera de ellos en este momento de sus carreras. Kobe Bryant aún tardarÃa dos temporadas más en pegar un bajón claro en su producción. Karl Malone tres, ya en su último año como profesional. Y Karim también dos años. LeBron cumple 34 años el 30 de diciembre y, si es cierto que quiere jugar hasta los 40 (de momento ha firmado cuatro años con los Lakers, contrato que finalizarÃa con 37) parece imposible que no alcance a Abdul-Jabbar, por mucho que baje su ritmo de anotación.