REDACCIÓN: El ONCE HN

Olimpia finalizó el torneo anterior y la pretemporada con dos broncas en partidos contra el Motagua, pero en el torneo Apertura parecía encontrar la tranquilidad emocional hasta que todo se fracturó con el bochorno de Surinam.

Por segundo partido consecutivo uno de sus futbolistas cayó en provocación y se fue expulsado de manera infantil. Había sucedido con Eddie Hernández ante el Vida y se repitió con José García ante Honduras Progreso.

El defensor, que había anotado el primer gol del partido, cedió ante el juego psicológico de Juan Bolaños al grado de chocar cabezas frente a frente. Ambos recibieron amarilla, pero el melenudo ya tenía una y dejó a los suyos con diez.

Tras lo sucedido, los aficionados del tricampeón nacional comenzaron a exigir al club que se sancione a todo aquel futbolista que es expulsado infantilmente y deja mal parado a la institución.

Pedro Troglio y la directiva debe trabajar seriamente en los ánimos de los jugadores, porque se puede volver recurrente en un torneo donde su camino al título iniciará en repechajes.