Nuestro futbol se vuelve a vestir de luto, se mancha de color sangre y huele a gas lacrimogeno el clásico capitalino entre Olimpia y Motagua el cuál terminó siendo suspendido cuando un grupo de aficionados atacaron con varios objetos pesados el autobús de Motagua provocando heridas en 4 de sus jugadores: Emilio Izaguirre, Roberto Moreira, Matias Galvaliz y Jonathan Rougier.
Despues de esta accion, el Motagua decidio no presentarse en el juego retornando al hotel de concentracion y atendiendo a sus jugadores heridos. En las afueras del Estadio se genero una batalla campal que varios muertos y heridos por un enfrentamiento entre “barras”.
Ya se han identificado dos de las personas que perdieron la vida como Carlos Fernando Alvarado (26) y Jeferson Banegas (24). Este enfrentamiento provoco que la fuerzas de seguridad lanzaran gas lacrimogeno afectando a todos los aficionados que estaban dentro del estadio lo cual desencadeno en una invasion a la cancha.
Como medio de comunicacion, lamentamos profundamente todo lo sucedido, esto es el reflejo de la locura social en la que Honduras esta sumergido, hacemos un llamado de conciencia a cada uno de los aficionados que asisten al estadio, se debe entender que el futbol es entretenimiento, no debe existir violencia entre los espectadores, es un deporte en donde la fuerza se mide durante 90 minutos en la disputa de un balon. NO MAS VIOLENCIA!
Seguimos con el mismo problemas de siempre
Un llamado a los jugadores tanto del olímpia como del Motagua que llamen a sus aficionados a la tranquilidad porque no podemos seguir así @HCHTelevDigital @LaTribunahn @CDOlimpia @MOTAGUAcom pic.twitter.com/JMzeXWo7s3— Wilian Ariel Tejeda Baquedano (@Wilian93813600) August 18, 2019